09 agosto, 2006

¿Porqué somos ecuménicos?

Por: Valdo Ferrari

"El que no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve".

Algunas personas piensan que la iglesia catolica no merece que estemos en comunión con ella. Creo que esa sola frase ya es un error, va en dirección equivocada. En primer lugar, quien se reivindique como evangelico parte de una teología de la Gracia, no de los méritos. Tenemos la Gracia de reconocer a hermanos y hermanas en Cristo más allá de dónde se ubiquen en el mapa religioso. Y de esto mismo se trata. Ningún concilio podrá impedir que "el viento sople donde quiera" y Dios siga levantando hermanos y hermanas, obreros, profetas y mártires del Evangelio en la iglesia católica como en cualquier otra. No soy ingenuo, conozco profundamente los daños que hace la institución católica a mucha gente sencilla, y cómo en nuestros países han acompañado a menudo los horrores más terribles cometidos contra los pueblos. Pero tampoco soy hipócrita: muchas denominaciones evangélicas han hecho lo mismo, incluyendo seguramente a los metodistas. ¡Y qué decir de los presidentes norteamericanos que invaden, matan y saquean pueblos en todo el mundo siendo ellos evangélicos -¡y metodistas!- y acompañados por millones de evangélicos de su país, y de otros países. ¿Acaso esos no son tremendos pecados?.

En nuestro caminar, muchas personas católicas y muchas evangélicas han sido de bendición; y muchas católicas y muchas evangélicas no lo han sido. Por lo tanto estamos errando el criterio para tratar de diferenciarnos entre nosotros.

La iglesia católica debe cambiar el nudo de su teología y el ritmo de su corazón. Las iglesias evangélicas también debemos revisar muchos aspectos teológicos y de práctica concreta. Es el camino de la santificación.

Con todos los errores de las instituciones y de sus jerarquías, Dios no ha dejado de estar presente entre los católicos, como entre muchas denominaciones y religiones alrededor del mundo. Y si Dios no se va de en medio de ellos, nosotros seguiremos estando.

Fraternalmente,

Valdo Ferrari
Pastor Iglesia Metodista de Remedios de Escalada
Buenos Aires, Argentina